jueves, 2 de mayo de 2013

Actividad 6

CAMBIAR EL FINAL DE UN CUENTO O LEYENDA TRADICIONAL

             El Popol Vuh
 

Los señores de Xilbalba: Sangre, Ictericia, Cráneo e Infortunio, que vivían en el mundo subterráneo querían desaparecer a los hombres para quedarse como dueños absolutos de la Tierra, pero esto no fue posible. Un día Ixquic (campesina simple), estaba en el campo y se dirigió a un árbol del cual salía una voz que le dijo: - Tú vas a ser la madre de mis hijos, así que dirígete a la casa de la abuela y dile lo que te acabo de decir. Ixquic obediente se dirigió a la casa de la abuela con ayuda de las aves mensajeras.

 Al llegar la abuela la recibió muy mal y le preguntó qué era lo que deseaba, y ella le dijo todo lo que le había dicho el árbol, pero la abuela no le creyó y le dijo que si eso era cierto tendría que pasar por unas pruebas: primero le dijo que fuera al campo y que trajera un canasto lleno de maíz y así fue y luego le dijo que si esos eran sus nietos tendrían que nacer en lo más alto de la montaña y entre espinas y que al tercer día tendrían que regresar caminando con sus propios pies y crecidos. Al tercer día regresaron tal y como lo había dicho la abuela, ésta se quedó sorprendida y les dijo que si querían vivir ahí tendrían que atender a sus otros nietos y a ella, Hunahpú e Ixbalanqué, sin reclamar dijeron que así sería.

Un día Hunahpú e Ixbalanqué le dijeron a la abuela que no sabían trepar a los árboles y entonces la abuela les dijo a sus otros nietos que les enseñaran y cuando les enseñaron subir a uno ya no volvieron a bajar. Desde ese día fueron los únicos nietos de la abuela.

 Las aves mensajeras mandadas por los señores de Xilbaba, les dijeron a Ixbalanqué y a Hunahpu que los señores del mundo subterráneo los invitaban a a un gran festín, ellos sin duda aceptaron y le dejaron a su madre y a su abuela y  un palo de bambú para que la cuidaran todos los días y que si un día  se llegaba a  secar lo tenían que llenar de las semillas del fruto de la naturaleza para recordar a pesar de que  significaba la visita final.

Al llegar al mundo subterráneo los señores de Xilbaba los mandaron a dormir a la cabaña del frío y al día siguiente disfrutarían del gran festín, a la siguientes dos lunas llenas los mandaron a la casa de la tempestad y el último día a la casa de las lanzas, saliendo sin ninguna gota de sangre. Ese día se llevó a cabo el gran festín donde salieron satisfechos y los señores de Xilbaba les dijeron que se entregaran a los brazos del señor horno del fuego, así lo hicieron y fallecieron; pero al día siguiente volvieron a nacer y con ayuda de las aves mensajeras les hicieron creer a los señores Xilbaba que eran chamanes y resucitaban a las personas y éstos dejándose engañar pidieron que hicieran la magia y Hunahpú e Ixbalanqué los mataron y nunca los resucitaron. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario